Por: Carlos Urias (@ElcarlosUrias)
Mucho ya se ha hablado de las películas mexicanas, se habla principalmente de repetir las mismas narrativas como las comedias románticas, películas de comedias y nunca dar un enfoque serio en ellas, sin embargo estos últimos años hemos visto propuestas interesantes en el cine mexicano como lo fue ‘Ya No Estoy Aquí’, puedes leer la crítica de Osvaldo Escalante dando click aquí. Otra buena propuesta del cine mexicano es la cinta ‘Chicuarotes’ que hace pocos meses fue estrenada en la plataforma de Netflix.
No obstante, a pesar de que tengamos opciones alternativas a las clásicas propuestas que se nos han presentado, hoy hablaremos de una comedia romántica que fácilmente se podría dar a entender por la “copia” de ‘Proyecto X’, pues la trama que se nos presenta tiene una gran similitud, he aquí la sinopsis de ´Hasta que la boda nos separe´:
Una boda es el acontecimiento más esperado por casi todas las parejas, pero para Daniel (Gustavo Egelhaaf) y María (Diana Bovio) será su peor pesadilla, pues aunque el deseo de los dos es tener una boda junto a la playa, el padre del novio tiene una idea totalmente diferente: una boda tradicionalmente mexicana. Para evitar problemas, los novios deciden organizar dos bodas, la primera será para complacerlos a ellos y la segunda para complacer al padre de Daniel. Todo pinta bien hasta que se dan cuenta que las fechas de las ceremonias coinciden, convirtiendo toda la planeación en un caos que tendrá consecuencias en la relación de Daniel y María.
Una clara representación de la sociedad mexicana es la que nos muestra esta película, los diferentes “tipos” de familias que se pueden presentar dentro del panorama mexicano, teniendo una cultura arraigada a una posición económica y un estatus social; Por una parte tenemos a la familia de Daniel, una familia proveniente de una comunidad alejada de los lujos, que de manera humilde se ganan el pan de cada día y tienen una cultura humilde. Por su contraparte la familia de María, nos la presentan como una familia refinada, preocupada por la política y que vive entre lujos donde el dinero no es el problema.
El choque de las dos culturas que tienen las familias de estos protagonistas que contraen matrimonio es el mensaje real de la película, que no existe la familia perfecta, y una clara critica a que los lujos no hacen a las personas o como estas se deben presentar ante la sociedad, como por ejemplo la familia de María, intenta mantener una buena postura ante los reflectores y las cámaras porque eso puede afectar su carrera política y ese comportamiento hace que no disfruten la vida realmente.
Lo que realmente caracteriza a la película y por lo que se cuestiona que sea una copia del filme estadounidense ´Proyecto X´ es la trama principal presentada, así como el formato en el que esta viene, pues aplica el ya conocido formato de mostrar como si fuera un video casero o filmado por un tercero, esto lo podemos ver también en la serie televisiva de comedia ´The Office´.
El clímax de la cinta llega cuando el tan esperado día de la boda de Daniel y María llega, pues las dos familias, tan distintas entre sí, se encuentran y todo termina en un caos total, una fiesta que parece salirse de control.
El montaje y puesta en escena de esta situación donde la fiesta se sale de control en una confrontación de cultura sin barreras, esta película no los muestra de la mejor manera, pues cada personaje es característico hasta el punto en el que nos toca ver eso, por lo tanto el alcohol y el verlos en un nivel donde la locura se les subió a la cabeza, haciendo cosas que sus personajes realmente no realizarían es extraordinario, pues vemos esa fiesta que transmite emoción y personajes fuera de su zona de confort causando una buena impresión hacia el lado cómico.
Con buenos chistes, buenas escenas y el fenomenal cameo de Adal Ramones, este criticado filme mexicano tiene lo suficiente para sacarnos unas buenas carcajadas mientras el mensaje final de la película, a pesar de ser de comedia, es una crítica social levemente elaborada de disfrutar el momento y que la buena compañía siempre será la de la familia aun cuando esta nos puede llegar a avergonzar, no existe un estándar de comportamiento y debemos aceptar a nuestra sangre tal y como es.
Esta cinta reúne los elementos necesarios para entretener un buen rato y sacar de la zona de confort mientras apoyamos al cine mexicano (que mucho apoyo hace falta)
Me retiro, pero no sin antes mencionar: No entres a ver esta película si quieres ver una obra maestra o la mejor película de comedia que hayas visto en tu vida, porque está lejos de serlo, pero vale la pena darle una oportunidad a un filme que reúne buenos chistes locales de México incluso sin caer en una comedia básica, que solo está diseñada con fines de entretenimiento.
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