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A Rainy Day in New York: Nada nuevo… ¿o sí?

Cinta dirigida y escrita por el polémico cineasta neoyorquino Woody Allen. Su elenco está encabezado por los jóvenes Timothée Chalamet, Elle Fanning y Selena Gomez.


Gatsby (Timothée Chalamet) y Ashleigh (Elle Fanning) son una joven pareja universitaria. Cuando ella es enviada a Manhattan para entrevistar al director de cine Roland Pollard (Liev Schreiber) como parte de un proyecto escolar, Gatsby decide que es el momento ideal para que vivan un fin de semana romántico en La Gran Manzana. Pero una extraña situación hará que este par se tenga que separar, lo que conlleva a que ambos vivan una serie de aventuras bajo la intensa lluvia neoyorquina.

Desde 1982 Woody Allen había estrenado, por lo menos, una película por año. Este impresionante record se vio interrumpido en 2018 cuando Amazon, estudio con el que Allen tenía un contrato para desarrollar varios proyectos, decidió no distribuir la única película que ya habían grabado con el cineasta neoyorquino, esto debido a las declaraciones que éste hizo sobre el movimiento #MeToo y al resurgimiento (aunque según yo siempre han estado ahí) de las acusaciones en su contra por parte de su hija adoptiva, Dylan Farrow, y de su exesposa, la actriz Mia Farrow. Tras una dura batalla legal, Amazon le entregó los derechos de esta película a Allen para que la distribuyera como quisiera (o como pudiera). Y es así como este 2019 llega a las salas de cine el largometraje número cincuenta de este director: ‘A Rainy Day in New York’.


A estas alturas sería absurdo sorprenderse porque un film de Woody Allen sea repetitivo. Este cineasta ha adoptado un estilo muy característico desde sus primeros trabajos, lo cual resulta increíble al ver que varias de sus obras tienen un lugar especial en la historia del cine norteamericano a pesar de contar, con sus bemoles y sostenidos, historias similares. En su nuevo film, Allen nos presenta una comedia de desencuentros y la premisa de “amor, desamor, amor, desamor” mientras aprovecha para hacer que el espectador se enamore de su natal Nueva York. Por su puesto no hay nada que no hayamos visto antes pero ‘A Rainy Day in New York’ tiene algo que la hace encantadora tanto para quien ha seguido la carrera del neoyorquino como para quien tiene su primer encuentro con él.

Quizá el encanto de esta cinta esté en que es su premisa es universal, todos hemos sido jóvenes, todos nos hemos enamorado y todos nos hemos decepcionado del amor. Todas estas situaciones bajo la maravillosa pluma de Allen hacen que la historia en lugar de ser un drama que te haga ponerte melancólico sea una comedia ligera que te hace recordar una etapa o momento en tu vida con optimismo y hasta alegría.


O quizá sea la frescura de su elenco, jóvenes conocidos por todos rodeados por veteranos pero encantadores actores. Timothée Chalamet está increíble, no porque en otras ocasiones no lo esté, pero aquí está en un papel tan ligero y ad hoc con su estilo actoral que en ningún momento lo vemos sobreactuando o pasándose de la raya, en cada escena, en cada línea, en cada situación está impecable. Lo mismo sucede con Selena Gomez, cuyo personaje es una combinación entre alguien cool y rebelde, algo que a esta chica no le cuesta ningún problema interpretar. Pero sí alguien vale la pena en el elenco juvenil es Elle Fanning, es divertidísima y cumple con un personaje cuya estructura es muy complicada. Esta chica es una mezcla entre una mujer culta pero que durante gran parte del film tiene que actuar como una chica tonta, o al menos inocente, además, varias de sus acciones podrían ser cuestionables pero es su natural encanto y la extraordinaria manera en la que lleva sus escenas divertidas las que hacen que disfrutemos a su personaje en lugar de odiarlo.

El resto del elenco cumple de gran manera. Liev Schreiber hace una gran interpretación del típico cineasta culto pero imposible de tratar. Sin embargo, quien se tiene que llevar las palmas de todos en esta producción es Jude Law, irreconocible cuando te enfrentas a su personaje por primera vez, presentándonos a un hombre que se va desmoronando paulatinamente. Lástima que todo lo que tenga que ver con el cine de Woody Allen esté borrado de las ceremonias de premios porque lo de Law merece algún reconocimiento.


La dirección de este film deja un poco que desear. Aunque el trabajo del director hace que la película tenga un buen ritmo a pesar de tener diálogos en ocasiones bastante extensos, hay que decir que prácticamente Allen puso su cámara y dejo que las cosas pasaran frente a ella, y en varios momentos esto es muy literal, hay escenas donde la cámara está estática mostrándonos a un par de personajes hablar mientras están sentados, de repente uno de ellos se levanta y la cámara no sigue su trayectoria haciendo que no veamos el rostro de esta persona durante unos segundos. A pesar de todo esto la película si tiene un cierto encanto visual gracias al director de fotografía Vittorio Storaro, quien nuevamente explora la técnica de cambiar la paleta de colores de acuerdo a las emociones de los personajes.

‘A Rainy Day in New York’ es una película que no nos ofrece nada nuevo, pero cualquiera que pague un boleto para ver algo de Woody Allen sabe que se abstiene a eso. Pero esto no hace que la película sea encantadora, esté extraordinariamente actuada y sea visualmente atractiva. Quizá no tengamos esos diálogos que hacen que Allen sea considerado uno de los mejores comediantes de todos los tiempos, pero sí es una película que podría posicionarse del lado de las obras de que valen la pena de este cineasta neoyorkino. Quien disfrute del cine de Allen la va a disfrutar y quien nunca ha visto una película de él podrá encontrar en esta la oportunidad perfecta para interesarse en el cine de este hombre ya que su elenco encabezado por estrellas juveniles del momento va a atraer a una buena cantidad de personas a las salas de cine.


Calificación: 7/10

Por: Freddie Montes (@FreddieMontes)

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