Por: Juan Tlapalamatl (@Jul_ElSombrero)
Noche de Fuego de Tatiana Huezo se ha convertido en la película que representará a México en los Premios Oscar del próximo año, así lo dio a conocer la Academia Mexicana de las Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC).
La película rescata el argumento de Ladidy, libro de Jennifer Clement que narra la supervivencia de las mujeres en México, con un narco dominante en la Sierra de Guerrero. Esta premisa rescata Noche de Fuego para llevar a la pantalla grande una historia con un retrato actual, cuyo trasfondo resulta más incómodo por la realidad a la que todo mexicano se encuentra expuesto.
Ambientada en montañas mexicanas, con participación de habitantes de la región de Querétaro, la trama se centra en Ana y sus dos amigas, a quienes vemos crecer a lo largo de la película. El narcotráfico que acecha la montaña mantiene el interés en el cultivo de amapola y Rita, madre de Ana, vive en constante estado de preocupación por el secuestro de mujeres en la región.
El universo de Ana nos permite encontrar cariño en los personajes con aspectos que te acercan a ellos de manera tan cotidiana y con los cuales recorremos su desarrollo a lo largo de la historia. La tristeza al corte de cabello de una niña, la lucha de una madre, los sueños de convertirse en profesionista y hasta la primera menstruación, son ejemplos de la cercanía que se tiene con los personajes. Estos aspectos contrastan adecuadamente con el miedo latente de perder a las personas que amamos a nuestro alrededor, por la violencia a la que cualquiera puede estar expuesto y cuyo temor mantiene al espectador al filo de la silla en todo momento.
La incomodidad que te transmite la película es un reflejo de cómo se vive la violencia en México, pero cuya diferencia con películas similares en exposición de problemáticas sociales, como Sin Señas Particulares, radica en una realidad con matices, pues no cae en la premisa de ver todo desde un tono gris sino también devela colores que llegan a conmover al espectador.
Dirigida por Tatiana Huezo, documentalista salvadoreña naturalizada mexicana, reconocida anteriormente por Tempestad con el Ariel a Mejor Dirección en documental, aborda un retrato con distintas problemáticas sociales en nuestro país de manera viva. Además de haber sido reconocida con la Mención Honorífica del Festival de Cannes, la película se confirma como una cinta capaz de transmitir los discursos que aborda de manera tajante.
Quizá "Noche de Fuego" no es la película que más impacto ha logrado en el cine mexicano durante los últimos dos años, pero la realidad con la que se presenta en pantalla mantiene un discurso más conmovedor e impactante desde una mirada propia.
Noche de fuego se consolida en el cine mexicano como una propuesta interesante que competirá dentro de los Premios Oscar. Entrega que presentará lo que comúnmente resalta al cine mexicano en el extranjero: el retrato de un país como el nuestro y del que, con orgullo o no, representa la idiosincrasia mexicana.
Comentarios