Por: FreddieMontes (@FreddieMontes)
Cinta animada dirigida por Tony Cervone y escrita por Kelly Fremon. Cuenta, en su idioma original, con las voces de Zac Efron, Amanda Seyfried, Gina Rodriguez, Will Forte, Mark Wahlberg y Jason Isaacs.
Después de años de resolver misterios como equipo, Scooby y su pandilla se enfrentan a dos grandes retos. El primero, un rompimiento obligado dentro del grupo; el segundo, un malvado plan orquestado con la intención de desencadenar un apocalipsis canino. ¿Logrará Misterio a la Orden resolver este caso y salvar al mundo?
Hacer una película dirigida al público infantil resulta cada vez más difícil. Lo que a mi generación, que no es muy antigua, le sorprendía, ya no causa el mismo impacto en los niños de ahora que tienen todo tipo de productos al alcance de sus manos. Esta es la razón por la cual los grandes estudios han optado por llenar sus espacios cinematográficos infantiles con secuelas, adaptaciones o remakes. ¿Para qué? Para tener una apuesta, según ellos, segura, considerando que si su nueva producción no logra conectar con el nuevo público al menos lo hará con el público adulto a través de la nostalgia.
El asunto es que esta “fórmula” no siempre funciona. No hay que irse muy lejos para encontrar ejemplos de ello, el año pasado se estrenaron ‘Toy Story 4’ y ‘La Familia Addams’, una secuela y otra adaptación, respectivamente. La primera triunfó tanto en taquilla como en crítica, incluso ganó el Oscar a mejor largometraje animado. La segunda, sin ser un fracaso taquillero, no generó ganancias millonarias y mucho menos fue alabada por la crítica, demostrando así que apelar a la nostalgia es una apuesta arriesgada.
Por ende, no es una sorpresa que ‘Scoob!’ siga el “factor nostalgia” para tratar de atraer, por partes iguales, tanto al público infantil como al público adulto. El problema es que esta cinta se queda en un negativo punto medio sin lo necesario para conectar con las nuevas generaciones pero tampoco para encantar a los fanáticos de la serie animada.
Vamos con el primer punto. Esta cinta no logra posicionar de manera correcta la marca Scooby-Doo con los infantes ni funcionar como un vehículo para atraer a las nuevas generaciones porque divide, desde su acto inicial, a sus protagonistas, haciendo imposible que exista algún tipo de empatía hacía ellos como grupo. No hay razón para creer que un niño que está entrando a este universo por primera vez le va a importar si el equipo se separa, aún menos cuando Shaggy y Scooby encuentran a nuevos cómplices que resultan ser mucho más cool.
Pero, en este sentido, el mayor problema es que estamos ante una historia más cercana al universo de los superhéroes que al de “misterio a la orden”. Está claro que los productores decidieron hacerlo así debido al auge que viven este tipo de producciones, pero seamos honestos, ningún niño o joven necesita un producto más sobre superhéroes, la mayoría de las películas dirigidas a ellos abordan este tipo de tramas, por lo que la magia de este filme para no ser uno más del montón debió radicar en ser diferente, no en apegarse a los estándares.
A pesar de esto, le es más fácil a ‘Scoob!’ conectar con las nuevas audiencias ya que, para el resto, de plano, no ofrece nada atractivo en la búsqueda de la empatía a través de la nostalgia. Como ya comenté, nos encontramos con una pandilla dividida desde los primeros minutos, pero además, la película no desarrolla una trama al estilo de la serie, no hay ningún fantasma, enemigo enmascarado o misterio que resolver. Para ser más claro, las versiones live-action de 2002 y 2004 son más files a la caricatura que esto. Sencillamente ‘Scoob!’ tiene muy poco de ‘Scooby-Doo”.
Independientemente de lo mencionado en párrafos anteriores, este filme podría caminar por sí solo y posicionarse, por lo menos, como un producto decente, sin embargo, su desarrollo narrativo es simplemente pobre. Es increíble que teniendo a cinco personajes protagónicos disponibles para hacerlos brillar sea más entretenido e interesante lo que sucede con un par de personajes secundarios que ni siquiera gozan de mucho tiempo en pantalla. Además, el guion se enreda tanto entre sus propios conceptos que queda indefenso al momento de definir el rumbo que puede tomar su historia. Por si esto fuera poco, son muy claros los momentos en los que los guionistas se quedan cortos de ideas debido a que constantemente recurren a la vieja confiable: atiborrar su relato de referencias tanto a la cultura pop como al propio universo de Hanna-Barbera. Es un hecho que el elemento Scooby-Doo se utilizó para vender, ya que el relato por sí mismo carece de fuerza, originalidad y encanto.
A pesar de lo anterior, hay algunas cosas que se pueden rescatar de este filme. Para empezar tiene una fantástica secuencia inicial en la cual vemos más misterio y fidelidad al producto original que en el resto de la cinta. También cuenta con algunos momentos que resultan entretenidos gracias a pequeños chistes salpicados que funcionan en lo individual. Y, por supuesto, las referencias atraen, resultan atractivas y funcionales mientras no llegan al punto máximo de la explotación.
En resumen, ‘Scoob!’ es una película que no funciona ni como homenaje ni como producto nostálgico ni como el vehículo para atraer a las nuevas generaciones. En su afán por parecerse a una película de superhéroes termina por convertirse en un producto del montón, fácilmente olvidable. Por supuesto que el cine de superhéroes no está matando al cine pero quizá sí está matando la originalidad de varios guionistas que solo quieren apegarse a estas fórmulas. Sin duda es un mal inicio para lo que busca convertirse en el Universo Cinematográfico de Hanna-Barbera, sin embargo, hay elementos positivos de esta cinta que si se rescatan y se replantean en cintas futuras podría enderezar el camino para este estudio. Por lo pronto, es un tache.
Calificación: 4/10
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