Por: Osvaldo Escalante (@OsvaEsc)
Pixar regresa a Disney+ ahora de la mano de Pete Docter, a quien conocemos por traernos UP (2009) e INTENSAMENTE (2015) y que rápidamente se ha convertido en una de las mentes maestras detrás de este estudio de animación.
La película nos lleva a través de los ojos de Joe, un músico que tras un accidente ha perdido su alma, por lo que ahora es su trabajo encontrar una forma de regresar a la vida.
Sí, Pixar es un estudio que se ha caracterizado por hacernos llorar en la gran mayoría de sus películas, pero también un estudio que en los últimos años se ha dedicado a traer películas que funcionan como secuelas de películas anteriores, lo cual no está mal, pero se apegan a generar nostalgia en el espectador, más que una genuina y nueva emoción. Y eso es precisamente lo que le aplaudo a SOUL; una película original y que se encarga de, a través de sus personajes y las aventuras que van viviendo, lograr que el espectador se emocione, se ponga triste y se preocupe, para al final darnos un excelente mensaje sobre valorar la vida y vivir cada minuto de ella.
En las voz principal tenemos a Jamie Foxx, a quien no pude ubicar en ningún momento, pues me da la impresión de que moduló su voz de una manera distinta a como habla normalmente (o al menos como las demás películas que he visto). Y pues, como era de esperarse, lo hace muy bien. Foxx le logra dar vida y alma a un personaje que la ha perdido. Su voz lo es todo en esta película para lograr conmover al espectador. En el reparto también contamos con Tina Fey en el personaje de 22 y al gran Daveed Diggs en un papel pequeño pero que da mucho gusto escucharlo.
La animación es algo excepcional. Obviamente es Pixar y con el presupuesto que maneja no es algo que debería de sorprendernos, pero al jugar con dos planos/dimensiones, como lo son La Tierra y el mundo donde se encuentran las almas, da pie para un contraste entre New York y un mundo de fantasía. Al final sigue siendo una animación muy al estilo Pixar, pero que no decepciona en ningún aspecto.
La película no es perfecta, y de hecho le encontré algunos errores que no puedo comentar por tema de spoilers, pero que cuando los vean se darán cuenta ustedes mismos. Algunas decisiones en el guion terminan por contradecir las propias reglas establecidas anteriormente, pero como funcionan para seguir con la trama, uno lo puede perdonar o llamar "conveniencia”.
Lo que más me gustó es que una vez más nos demuestran que la animación no debería de ser un género aparte, sino una manera de hacer arte, como lo son las películas con actores en carne y hueso. Me gustó que el mensaje que se da y toda la moral y existencialismo que se maneja en la película sean lo suficientemente profundos para un adulto, pero también amenos para un niño, alivianando todas estas situaciones con un poco de humor; de esa manera el niño no se aburrirá.
Responder la pregunta sobre si SOUL es la mejor película de Pixar es algo complicado. Como digo, está entre lo más alto, pero también es cierto que las películas que consideramos las mejores, como en mi caso WALL-E y TOY STORY, ya llevan años en el mapa y mientras se estrenan y estrenan películas, no se pierden del radar. Supongo que es cuestión de tiempo y ver en retrospectiva esta película para ver sí genera lo mismo que las ya mencionadas.
En lo personal, mi favorita es WALL-E, y no hay -de momento- ninguna que le haya quitado el puesto.
Definitivamente SOUL se encuentra entre lo mejor de Pixar y lo mejor del 2020, únicamente por detrás de WOLFWALKERS (en películas animadas me refiero), y que estará dando mucha guerra en la temporada de premios, pues lo merece completamente.
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