Por: David Cavazos (@DavidCav21)
Space Jam (1996) de Joe Pytka fue de esas películas con las que crecí, viéndola a través de la televisión abierta. A pesar de que fue parte de mi infancia, es evidente que no era una buena película y el impacto de nostalgia que tenía era muy inferior comparada con otras producciones que disfruté a edad temprana. La aventura de la leyenda del basquetbol Michael Jordan y su mancuerna con los icónicos Looney Tunes se convirtió en un fenómeno de culto, incluso más de lo que hubiéramos imaginado pues, al ser una mezcla entre animación y live action e inspiración de un comercial de Nike, rompía la barrera de la irrealidad a través de la comedia. Dicha formula se repitió, de una mejor manera, con Looney Tunes: Back in Action (2003) de Joe Dante, la cual combinaba la técnica nuevamente y tenía como prprotagonista a Brendan Fraser, aunque estuvo lejos de ser ese fenómeno; incluso fue un fracaso en la taquilla. Los años han pasado y tenemos nuevamente un enfrentamiento “épico” del baloncesto con otro de los grandes, LeBron James en una nueva aventura de proporciones cósmicas.
LeBron James es una superestrella del baloncesto, pero como padre tiene conflictos con su hijo Dom. LeBron quiere que su hijo se enfoque en el baloncesto, Dom quiere dedicarse a los videojuegos. Ambos acuden a los estudios de Warner Bros. para una negociación, pero todo detonará en el momento que Dom es secuestrado por una inteligencia artificial llamada Al G. Rhythm, quien controla todos los universos de Warner Bros. en el servidorverso. Para poder rescatar a su hijo y a todos los que ama, LeBron tendrá que enfrentarse en una partida de baloncesto. En búsqueda de su equipo, LeBron hace alianza con Bugs Bunny y el resto de los Looney Tunes para dar batalla en el baloncesto o, de lo contario, ellos también desaparecerán.
Si eres de esos tipos que odiaste esta película porque nada tiene sentido, porque es estúpida, porque es muy cliché, porque es muy infantil, porque es un comercial, porque todo se siente muy forzado, pero eres un nostálgico de primera y amaste la primera película... amigo, lanzaste un escupitajo al aire y te cayó en la cara.
Space Jam: A New Legacy es exactamente igual que su antecesora, la manera en la que inicia, la manera en cómo entramos al mundo de los Looney Tunes, los mismos patrones están ahí. LeBron James tiene el mismo estándar de calidad actoral que Michael Jordan... ninguno, incluso se siente raro en los primeros 20 minutos, pero su carisma se desenvuelve conforme avanza la película, incluso mejor cuando vemos su versión animada y no recurrimos a la actuación en su totalidad. Mientras que la presencia de los Looney es favorablemente divertida en la mayoría del tiempo, tanto en 2D como en su alucinante 3D que reluce de manera espectacular. A pesar de que el enfoque recae más en James que en los Looney, el juego de baloncesto es tal cual el mismo patrón que la anterior, pero más alargado. La desigualdad del ritmo de la película es tan evidente que sus dos horas se sienten más raras que la hora y cuarto que duraba la película anterior.
En cuanto a las referencias, las que más disfruté fueron hacia Harry Potter. Maldita sea entre todas las propiedades que habrían elegido, eligieron a Austin Powers, no podría estar más contento con ello, hasta la presencia de Rick & Morty me encantó. Mientras que otras referencias pues... me dieron igual, fueron las que alentizaron la experiencia. Es muy evidente que es un comercial tanto de HBO Max como de gran parte de las propiedades de WB. Es comprensible la queja, pues resulta ser un grave distractor de la trama (construida de manera deficiente y manoseada por seis escritores que no pudieron armar algo concreto). Pero la película anterior también lo fue, con la esencia más noventera del mundo y quejarse de esta película bajo este argumento sería incongruente si amaste la película anterior. El villano malo porque es malo, aunque reconozco que Don Cheadle es carismático en pantalla, aunque por momentos risible, como ciertas escenas con las que intentan verse modernos, pero llegan a ganarse la pena ajena.
Space Jam: A New Legacy es una película estúpida, sin sentido, una película de los Looney Tunes, creo que no hay que ser muy listo para saber qué esperar. Es entretenimiento sin pretensiones, sin tirar a más... exactamente igual que la primera película. No puedes pedir mucho más que entretenimiento, el cual consigues… en parte.
Comentários