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Foto del escritorRedacción CinéfilosMX

Work It: No todo son relaciones toxicas en Netflix

Por: Carlos Urias (@ElcarlosUrias)


La nueva película estrenada hace unos días en la plataforma de Netflix, protagonizada por Sabrina Carpenter y dirigida por Laura Terruso, nos da la premisa de una nueva película de baile, con un toque de humor.


A continuación la sinopsis de esta película:

Cuando la admisión de Quinn Ackerman a la Universidad de Duke, la universidad de sus sueños, depende de su actuación en una competencia de baile, forma un grupo heterogéneo de bailarines para enfrentarse al mejor equipo de la escuela; ahora solo necesita aprender a bailar.


A comparación de otras obras de baile dramáticas como puede ser el caso de ´El Hip Hop está que arde´ (2004) esta cinta tiene como función principal una motivación y trasfondo más allá en los personajes.


En esta recién estrenada película observamos a una protagonista que no sabe bailar siquiera, sus ambiciones son entrar a una de las universidades más prestigiosas de los Estados Unidos, sin embargo esta encontrara en el baile una motivación y una razón de ser, buscar su propio sentido de la vida y lo que realmente te hace feliz.


Netflix nos tiene acostumbrados a meter relaciones casi siempre forzadas en cada una de las películas que produce, sin embargo, en esta película la trama no gira alrededor de una relación amorosa, tampoco en problemas que puedan dificultar a la protagonista en buscar su propio camino, de hecho solo miramos una relación amorosa en toda la serie y se denota gran química entre los personajes, fluyendo de la manera adecuada sin caer en lo estereotípico que nos tiene acostumbrados Netflix.


Quinn Ackerman a pesar de ser la protagonista en la historia es uno de los personajes que más carece de desarrollo e identidad pues realmente nos fijamos en el equipo y no en la protagonista, pues el trasfondo de querer ganar la competencia Work It es una ambición muy superficial, todo esto cambia cuando realmente la película le encuentra un sentido a Quinn.

La música: Es un punto totalmente a favor de esta producción, a pesar de no escuchar grandes canciones de la cultura actual (lo que yo esperaría de esta cinta) los beats y coreografías son realmente buenas, hace querer bailar.


En pocas palabras este reciente filme es una buena película familiar destinada para adolescentes que nos saca de la zona de confort de Netflix mostrando algo a lo que no estábamos acostumbrados como lo es una película inspiradora y de superación.


Sin embargo, no todo es perfecto en esta película, pues para decir verdad las actuaciones de la mayoría de los personajes dejan mucho que desear (No hablo de los performances, pues fueron muy buenos en realidad) pero todo esto se debe a que los demás personajes que conforman el grupo de baile no tienen participación en la película, es como si estuvieran de relleno únicamente, pues jamás sientes esa emoción de unión y solidaridad en el equipo que quieres que valla a la victoria.


Los demás personajes que participan pudieron tener un gran peso, sin embargo se decidió solamente darle protagonismo a Sabrina Carpenter (Quinn), dejando de lado personajes que pudieron haber sido memorables, un equipo de inadaptados que ganaron el torneo de baile más importante del estado con una motivación detrás de solo bailar porque si, no sientes conexión con ninguno demás personajes (por ninguno realmente) y todo constituye a que los personajes no evolucionan, no tienen desarrollo, no tienen identidad y no hay sentido de unión en un equipo porque todo gira alrededor de una protagonista que su ambición va por arriba de todo.

Aun así, es una película que se puede disfrutar en familia, recomendable si no esperas ver una obra maestra del siglo XXI y en cambio ver una obra de Netflix para adolescentes fuera de lo común.

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